le vélo calme: Montaje de la Geminiani. Trabajo terminado

El proceso de montaje es alegre, y mas conforme voy comprobando el resultado después de los trabajos de renovación de la Geminiani. No ha sido una tarea muy dura si la comparo con la de otras bicis que llegaron a mis manos con mucho mas óxido o con componentes que se resistieron a salir de sus alojamientos, no, ésta se ha dejado hacer y mimar.
Como en las demás bicis he realizado estas tareas generales después del desmontaje completo.

Lavado y engrase todos los rodamientos (dirección, eje de pedalier y los conos de las ruedas).
Comprobación del estado de ejes (de ruedas, pedalier y dirección) y ajuste posterior.
Baño de gasoil de la cadena y engrase posterior con grasa de litio.
Lavado del cuadro y pulido con suavidad para eliminar arañazos en la medida de lo posible.
Lavado, lijado y pulido de los componentes, de los accesorios cromados, los de acero y los inoxidables, así como el de la tornillería.
Lavado y blanqueo de puños y pedales.
Lavado, lijado y pulido de las llantas, comprobando en el interior el estado de las mismas.
Ajuste de tensión de radios y centrado de ruedas.
Sustitución de cables de freno, de cambio y sus fundas.
Sustitución de tacos de freno.

En este caso las cubiertas no se han cambiado, aunque si he revisado su estado interno y las he lavado. Lo merecían y sobrevivirán un tiempo mas. Tampoco las cámaras, pues están en perfecto estado.
Si he tenido que reemplazar y por fuerza mayor el cierre del sillín y el desviador trasero, como ya comenté en las publicaciones anteriores. Como medida de protección pasé unas pequeñas pinceladas de Titán al cubrecadenas, al desviador trasero y a la parte inferior del sillín para mejorar su aspecto.
Veamos ahora el resultado de este trabajito.

Sustitución del cambio trasero.

Limpieza de cromados.

Piezas de acero inoxidable y de acero.

El manillar que era el componente que llevaba mas carga de óxido ha quedado bastante bien.

La calidad de la pintura es normal, monocapa y con la limpieza y el pulido muchos de los arañazos han desaparecido, se aprecia bien en esta imagen comparativa junto a la palanca de cambio.

Hay que reconocer que la Geminiani ha sido agradecida y el estado con el que llegó era bueno. Aún así, el proceso que realizo a las bicicletas suele ser el comentado. Si recibo un encargo la mimo igual que si fuera propia; en cierto modo lo son puesto que el roce hace el cariño, y para abrillantar hay que rozarlas (lavarlas, lijarlas y pulirlas). El estado que presentan los materiales y su calidad hacen que los trabajos sean mas o menos complicados, en cuestion sobre todo de tiempo. Si el modelo de bicicleta con el que trabajamos es una clásica "rara", la búsqueda de repuestos se puede convertir en una ardua tarea. Se puede conseguir dependiendo de los puristas que seamos ó del encargo que nos hagan. Hay gustos para todos.

Tras mostrar algunas comparativas del antes y después toca enseñar el resultado en conjunto de esta bonita Geminiani.
Buscando por la red no he llegado a encontrar una idéntica. Algunas son similares sí, y en localizaciones tan dispares como Australia -en la página de Sserengetti- y en Chicago , USA. Deduzco que estas bicis se vendieron por muchos sitios. En España no he visto casi ninguna Geminiani plegable y menos aún de tres velocidades, aparecen a veces urbanas y de ruta.
La he sacado para probar y es ágil y manejable, idónea para desplazamientos y paseos urbanos. La frenada es suave y los cambios van bien.