jueves, 8 de diciembre de 2016

Manos a la obra (VI) Soportes para bici en suelo y mas avances

Sigo con el reciclado de palets, esta vez se me ha ocurrido hacer unos soportes para las bicis que estarán en el taller. Mila había probado unos con tacos pero el alto de éstos no era suficiente para que la bicicleta se mantuviera en pie, así que configuré un par de láminas que sujetaran la rueda marcando una recta secante lo suficientemente alta para que la bicicleta no se inclinara, éstas tablas están a su vez atornilladas a unos tacos. Para evitar que se inclinen las bicicletas, como base del soporte he atornillado una lámina larga que asiste la carga lateral de la bici. Bueno, mirando la imagen queda mucho mas claro. 
Dependiendo de la bicicleta antes de atornillar las tablas paralelas se mide el ancho de rueda de la bicicleta que quieras y ya está. Por ahora los que he preparado son para rueda de bici urbana y de carretera. Me faltan hacerlos para las ruedas gordas. 

Visto el soporte de perfil en el croquis están anotadas las medidas de la tabla base, 50 cm., y la del hueco para que encaje la rueda, en este caso un mínimo de 2,5cm.; dependiendo del tipo de bicicleta se dejará un ancho determinado conforme a su medida. Como el balón de cada cubierta es diferente, hay que dejar un margen, la rueda tiene que entrar ajustada pero sin presionar mucho. Para evitar astillas y demás, las láminas de madera están lijadas por el interior y los tornillos que unen el taco con la tabla son avellanados para que la cabeza no moleste. También son avellanados los tornillos inferiores que unen la tabla larga con los tacos de madera, para que el soporte sea estable.

Un poco de calor para el taller

Es otoño y aquí el frío, al menos para mi, hace mella. En el local tengo que estar bastante abrigada, y sobre todo utilizar un calzado con suela gruesa para que no se me enfríen los pies mas de la cuenta. Gran parte de ese frío se cuela por la puerta de acceso, ya que el local es una cochera, ahora adaptada, y aunque la puerta cierra bien tiene huecos suficientes para que el frío se cuele fácilmente. A menudo, tengo que trabajar con un forro polar, y encima de él un plumas, así que me parezco al muñeco de Michelín y no me muevo con soltura. El sur me ha adaptado bien a las altas temperaturas y poco a las bajas y este lugar (visto desde Málaga) es el norte. Así que Mila después de barajar varias alternativas llegó a la conclusión que una estufa de pellet iba a ser lo idóneo para ambientar el local.


Y hemos reservado este espacio para ella.
Ahora, con esta ayuda calorífica el taller estará mas calentito, y se podrá estar mas a gusto. No es lo mismo trabajar a 9º que a 13º... y poco a poco el frío ambiente se irá regulando, y aunque por la puerta se siga colando el frío, no será igual. Ya estamos ideando algo para cerrar esas entradas de fresco del norte.

De vueltas con la mesa auxiliar

... Esta vez al lado de la nueva fuente de calor. He limpiado la mesa y lijado las patas para darle con el producto de Brikensa, el Mirage. 



Una pena que el tablón grueso quede debajo, pero no me queda mas remedio si lo que quiero es tener una superficie amplia, de todas formas no hay mal que por bien no venga, esta base le dará consistencia a las tablas a la hora de atornillar y de trabajar sobre la mesa posteriormente.
Así es como quedan las patas tras el proceso y la mesa queda mas amplia. El motor y el mando on-off le da un toque peculiar.

Acondicionando a Arno

Le toca a una de las herramientas clave en el taller, al menos para mí, ya que me servirá para trabajar con fuerza en esos momentos en que las piezas que se resisten a salir de sus alojamientos tras muchos años de inmovilización.


Arno pesa lo suyo y tiene cierta edad, someteré a este noble pedazo de hierro a una limpieza profunda eliminando las manchas de pintura, el óxido con lijas y lana de acero y finalmente, engrasando la parte inferior donde está la rosca de apriete. Tengo que dejarlo bien, se lo merece.
Por otro lado Víctor prepara una plancha de acero inoxidable para que cuando se coloque el tornillo en el banco de trabajo quede bien ajustado con el apriete de tuercas y tornillos.

Después de una tarde de arduo trabajo Arno ha rejuvenecido y está preparado para ser reubicado en el banco donde ha vivido muchos años.

Aquí ya lo tenemos colocado en su emplazamiento con la lámina que Víctor ha preparado.







viernes, 11 de noviembre de 2016

Manos a la obra (V). Teka y Mirage

Revisando el título parece que voy a tratar de bicis, y no es el caso de forma directa. Seguimos con el montaje del taller.... de bicis.
Ya he acabado el decapado del viejo mueble, y no ha quedado mal del todo.
Lo siguiente será lijar para suavizar las marcas que han quedado de los pasos con la espátula y los restos de "barniz-decapante" y de seguido darle un protector a la madera para igualar el tono un poco mas. Para la ello empleo aceite de teka teca.
También trataré el panelado de madera de la pared y el mostrador, eso evitará que se deteriore y también que las marcas de los neumáticos de las bicis manchen las lamas. Después de tanto lijar no es plan dejarlas tal cual.
Con un paño limpio impregno el aceite y le doy a la madera en sentido de la veta. Le doy dos manos, con un espacio de tiempo suficiente para que los poros de la madera se beban el primer paso. Después de la segunda y ya seco, paso un segundo paño limpio para eliminar algún posible resto de aceite en la superficie, y de esta forma la madera queda enriquecida y protegida. Esta tarea la repetiré anualmente para mantener la madera nutrida. El mueble ha reaccionado de manera muy positiva el repaso con aceite.
El contrachapado se ha chupado bien el aceite y el tono que queda le da cierto aire viejo pero honesto, fiel, de alguna forma, a la edad que tiene este mueble. Probablemente en sus años mozos fuera un guarda ropa de cama, aunque no pudieron contarme con certeza que utilidad tenía. Por el volumen que tiene, lo usaremos para guardar cajas de piezas y otros accesorios que no utilizaremos a menudo, pero aún no hemos decidido qué... ya iremos viendo con el paso del tiempo.

El lavadero de bicis ya está terminado y hay que probar como se sienten los velocípedos en él.

El seno del fregadero ya está adaptado, la encimera de cemento (a la derecha del fregadero) me servirá para trabajar con los componentes, pulidos y demás artes. Los cuatro huecos nos servirán para almacenar cosas, veremos el hueco que queda cuando el fontanero coloque las tuberías.  

Una vez colocadas las estanterías en la pared, toca ir colocando el banco de trabajo, la mesa que tenía en Barcelona y otra estantería mas que hemos reciclado de un trastero. Toca organizar las cajas con componentes y reutilizar otras cajas de madera que tenemos por ahí repartidas para darle el toque que queremos. El espacio del taller con el soporte de reparación incluído ya está montado. La cosa va quedando así.

Otra mesa mas para el taller

Localizamos en el almacén esta mesa. Tiene un motor que seguramente funciona, con su instalación completa. Podría ser para lijar tuberías una vez soldadas o algo así... llevaba mucho tiempo guardada y estaba debajo de muchas cajas, así que no nos lo hemos pensado y la hemos rescatado.

Es artesanal, las patas están bastante oxidadas y la madera de la encimera es gruesa y pinta bien; tiene dos boquetes que, supongo, servirían para que la lija de banda pasara. Decidí colocar unas láminas de palets encima para aumentar la superficie de trabajo. El motor lo dejaré, así como el interruptor, ya que le da cierto estilo. Las patas las lijaré y neutralizaré el óxido con un producto de la industria química malagueña Brikensa llamado Mirage (sí, como el modelo de Campagnolo) que es una especie de bloqueante de óxido. La consistencia de este producto es similar a la cera líquida.
Hace poco presté mi ayuda aplicandolo en unas celdas de hierro enormes que se utilizan para cocer latas de conserva y después de tratarlas (las celdas) y soportar numerosos baños en grandes ollas a mas de 100ºC, ni el metal -sobre el que se ha aplicado- ni el producto, han sufrido alteraciones. Posteriormente las celdas han estado a la intemperie y sigue perfecto. Eso me dice que el producto aguanta bien la agresividad de los agentes externos.
Me reservo la idea para neutralizar algún cuadro de bicicleta de acero con este producto, Mirage de Brikensa,  a ver que sale.