
Estos son los aparejos de rescate utilizados para darle vidilla de nuevo a los elementos. Los cepillos los utilizo para eliminar pequeños residuos en las roscas, el cepillo de cerdas de latón y el estropajo duro para rascar en tuercas y tornillos, las lijas de taco de diferentes grosores (fino y super fino) para rascar finalizando el trabajo y abrillantar. Las lijas finas para el acabado al igual que la lana de acero. El taco de madera me ayuda para colocar las piececitas y no quedarme sin dedos. Las herramientas para el montaje. A veces utilizo el punzón fino para eliminar puntitos de óxido que se resisten, reconozco que una es un poco friki y a veces creo que me paso. Sarna con gusto, no pica. Dicen.
Aquí una comparativa de las herraduras. La delantera en un antes y después y en la imagen inferior el después del freno trasero... si se observa un poco en la tornillería se aprecian las diferencias entre ambos frenos.
Tras el baño de gasoleo, lavado, pulido y saneado, el cambio trasero también parece otro.
He destornillado partes hasta donde he podido y si la mugre hablara podría contarme andanzas, recorridos, anécdotas y también alguna que otra historia triste en no se sabe que lugar oscuro donde habitó y fue creciendo (la mugre).... pero me quedo con las ganas.
Ahora luce de nuevo... un "Triumpho" ;-)
Ahora luce de nuevo... un "Triumpho" ;-)
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