lunes, 29 de octubre de 2012

Decapado


Marcas de cincel
Ya están casi todas las piezas listas, y aunque ha sido necesaria la mano de un mecánico de bicicletas para extraer el plato por el procedimiento del cincel y el martillo, ha sido un éxito (a pesar de las marcas de guerra que pueden observar). Muchas de las Bh (no se si todas las antiguas) a la hora de extraer el plato presentan este inconveniente; de todas formas he podido averiguar al existencia de una herramienta que hace de extractor, fabricada por Agpa.
Bicinova con su maestría nos explica aquí y aquí como no fracasar en el intento cuando se utiliza esta herramienta, ya que corremos el riesgo de doblar la biela. Con los extractores de rodamientos (esa pieza que parece una araña de patas) nos la jugamos también si no poseemos destreza, ya que si la cosa está muy complicada al forzar el plato de la Bh, se puede doblar. Tras haber leído estos post y alguno más de personas con más conocimiento experimental que servidora, lo más justo y sensato fué llevarla al mecánico. No obstante al recoger el cuadro, Peter de Reciclo bike shop, me dijo que la pelea con el cincel y el martillo fué dura. De esta forma y gracias a ellos conseguí que el coste fuera notablemente inferior al precio del extractor Agpa y de la araña (extractor de rodamientos de moto). Los chicos de Reciclobikeshop son unos excelentes cirujanos de la bici y me ahorraron un contratiempo ya que la Gacela se salvó del desastre que podría haberle ocasionado al plato o a la biela.
Nominaciones
A partir de ahí y ya con el esqueleto de la bicicleta la cosa está casi preparada para proceder al decapado, antes hay que retirar las dos cazoletas del tubo de dirección y lo hago un un destornillador plano y un martillo, ya que aún no tengo la herramienta específica (tubo de extractor de cazoletas) Doy unos golpes con el destornillador desde el interior del tubo de dirección de la bici con cuidado para no dañar los bordes de estas piezas. Como principiante que soy suelo anotar la procedencia de los componentes que se van desmontando, así evito líos y vamos memorizando poco a poco. Al desmontarlas, tengo un poco de duda si la definición que hay definida en la foto es la correcta ¿la cazoleta alta vá en la parte superior del cuadro o abajo? En general el cuadro de la Gacela no está muy deteriorado, salvo los tirantes (o vainas superiores)que están repintadas de negro con spray y algún que otro desconchón repartido por diferentes partes en especial por el tubo inferior.
Preparada

Decapante en acción
La idea de pintarla ha sido de Juande, una criatura amante de las motos y con mucha habilidad en temas de mecánica y reparaciones, al cual trato de "contagiar la fiebre bicicletera". El me recomendó y facilitó el decapante en gel para dejar el cuadro vivo, en el metal. Los ingredientes para el proceso son éstos, el bote vacío servirá para depositar los restos de pintura que irán a parar a un centro de recogida de residuos; hay que ser cocherentes con el medio ambiente, ya que si la bici no contamina, no tiene mucho sentido contaminar para ponerla a punto. Equipada con guantes, gafas protectoras y un pañuelo a cambio de mascarilla, en un lugar ventilado (el patio de casa) procedemos con una brocha a repartir el gel decapante.En unos cinco minutos el agente químico comienza a levantar la pintura y pruebo a retirarla con una espátula y con un rascavidrios, dependiendo de las partes. El diseño del cuadro de la Gacela con el doble tubo superior hace mas atareada la faena, pero con paciencia va apareciendo el metal.

El efecto del decapante sobre las calcas hace que repita la acción sobre estas zonas. No obstante y si se desea acelerar el proceso, existe un accesorio similar al de una goma de borrar que se utiliza con el taladrador y elimina las calcas, pero con unos minutos más de rascado éstas tambien salen. El accesorio en sí, es muy práctico cuando deseemos retirar las calcas de otros cuadros, ya que la pintura no sufre desperfectos. Si las calcas estuvieran protegidas con una laca ó barniz, creo, que esta goma no nos serviría.
Aun con la pata cabra
Aquí hará falta una radial para cortar el borde que bloquea el eje de la pata de cabra. No tengo muchas fotos del decapado, ya que entre el jaleo que se arma, los guantes y el vicio de rascar se me fué el santo al cielo.

Punteras traseras
Tras emplear varias tardes en el proceso el resultado es este, sobran las palabras...

jueves, 18 de octubre de 2012

Pulir y abrillantar II

Abrazadera fontanera
Seguimos con el proceso de purificación y nos vamos encontrando de cerca los porqués. Mi consejo general para novat@s e iniciados, al hacerse con un objeto de segunda mano es "siempre aparecerá algo inesperado conforme a lo que tu capacidad de observación es capaz de abarcar", a no ser que seas un portento, claro, aunque ésto tiene su gracia... superar el reto. Atención con los detalles semiescondidos.
Desviador Triplex - En busca de la pieza

En mi caso particular, es obvio, dada mi inmadurez e inexperiencia. Y a pesar de tener claro y en posición on el concepto "aquí habrá sorpresas", suelen aparecen más. Por ejemplo, al realizar el despiece de la Gacela era consciente que esta abrazadera de fontanería ocultaba un problema. ¿cúal? Imaginaba que el tornillo de la abrazadera real no apretaba bien; pero así no fue la cosa. Si observamos la imagen la palanca de cambios de piñones está más elevada... por ahí va la cosa.
Al desmontarla la evidencia nos mostró el porqué se utilizó ese collar la arandela de plástico que sostiene la tensión de la palanca que tira del cable de cambio estaba rota. Toca buscar en un pajar desconocido una pieza que esté en algún rincón. Probaremos en tiendas y sino nos aventuraremos a conseguirla en segunda mano. Lo mismo tendremos que hacer con las manetas de freno ya que algunos de los anteriores propietarios del ciclo intentó quitar el óxido con una lima de debastar (los restos de su trabajo están en las ruedas que ya mostré en un post anterior y en las manetas).
Maneta rayada
Recuperable
Tras desmontar manillar, tija y dirección procedimos al limpiado de las piezas. Sacar la tuerca cilíndrica que va en el interior del tubo de dirección del cuadro me dió cierto quebradero de cabeza (falta de práctica sin duda) el tornillo de la potencia va atornillado ahí, cuando lo aflojamos para sacarla la pieza que rosca queda dentro del tubo del cuadro. Basta con poner de nuevo el tornillo y martillear. -para no achaflanar la cabeza de la rosca recomiendo no usar un martillo de hierro, sino una maza plástica, en caso contrario colocar un trapo, de esta forma al golpear no se daña-. Este cilindro se queda atrapado en las paredes interiores del tubo del cuadro de dirección y puede estar atascado, ya que la oxidación tiene tiempo de hacer su trabajo.
Productos

Repetimos con los productos que, por lo pronto, son los que nos ofrecen buenos resultados.
No obstante leyendo foros y en especial Cicloclásica aprendemos gracias a la multitud de aportaciones que se intercambian... apasionados, enamorados y forofos de los ciclos, del proceso de restauración que se ayudan entre ellos con un mismo fin: Darle vida a ese vehículo que te lleva donde tu quieras al ritmo que tu energía le transmita. Es aquí, en Cicloclásica, el lugar donde intentaré encontrar la pieza que necesita la Gacela, con la intención de que el mismo componente pueda volver a realizar su trabajo... a ver si hay suerte.
Potencia - Antes y después de la limpieza

domingo, 14 de octubre de 2012

Pulir y abrillantar

Despiece de herradura
Toca eliminar suciedad, óxido y sacar brillo a las piezas. Es un trabajo que necesita dedicación y paciencia. El desengrasante y el detergente son aliados para ir viendo poco a poco, hasta que punto está la pieza deteriorada; luego toca frotar más con los debastadores y pulimentadores, a partir de ahí es cuando empiezan a tomar color las piezas.
He hecho estas no están muy deterioradas (las hay que dan miedo meterles mano), y a pesar de ello, el brillo final merece el esfuerzo manual. A veces para que las piezas luzcan aun más se utilizan procedimientos mecánicos con taladradoras y/o pulidoras montados con accesorios de algodón, cuerda, fieltro, etc.Con éstos utensilios y la potencia de trabajo el acabado es espectacular. Las pastillas de acabado (que no sé como se llaman concretamente), son de dos colores, una marrón y otra azul. Estas se frotan con el taladro ó la pulidora en marcha impregnando  el algodón ó el cepillo de cuerda de esparto y luego se pasa la pieza.

Olimpic 70
Super Olimpic 66
Perfil después
Perfil del antes
Resultado 2
Resultado 1
A mas revoluciones mayor brillo; si el metal, por el calor de fricción, se impregna de una película negruzca, humedeciendo el metal ligeramente y frotando de nuevo, el carboncillo desaparece dando paso al brillo metálico que deseamos. 













El trabajo de acondicionamiento de estas piezas ha sido, tras el desmontaje, el lavado con detergente, limpieza con desengrasante y lijado con hojas de diferente dureza, dependiendo del metal. Impregno el metal con limpiametales y froto; cuando voy viendo brillo cambio de lija y así sucesivamente hasta lana de acero del 0000 todo esto dependiendo de lo afectado que esté el metal. Para el abrillantado utilizo trapos de algodón tambien con limpia metales (los hay para metal en general y específicos para aluminio, cobre, etc), el toque de gracia final con polvo talco, que al tener dureza cero, y aunque no lo parezca enluce un montón algo así como la lija más fina. El resultado final quedó como podeis ver en las comparativas. 
La verdad es que es un placer ver estas piezas rejuvenecidas.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Guardabarros y oxidación

Una vez desmontadas las ruedas y buscando una solución idónea para dejar las llantas de la mejor manera posible, continuo con los guardabarros. Los tornillos que sujetan los tirantes del guardabarros con la horquilla delantera están hechos un cuerpo, lo mismo ocurre con las pletinas que  sujetan el arco del guardabarro. Después de echarles aflojatodo, lijar, aceitar y todo lo que se me iba ocurriendo logré desatornillar solo un tornillo del par que va a la horquilla y otro de las pletinitas del arco, los otros dos se quebraron quedandose alojados en la horquilla y en una de las pletinas.

Proceso de limpieza de los guardabarros

- Detergente, estropajo suave y agua templada. Secado con trapo algodón.
- Abrillantado con limpiador para acero inoxidable, lana de acero super fina y trapo de algodón.
Tras el lavado con detergente






Tras la sesión de abrillantado
Tienen pequeñas abolladuras y bueno, como se trata de una bici mayor de edad, intentaré apañarlos dando pequeños contragolpes, pero para hacerlo bien ello necesitaría un martillo de cabeza redonda de chapista y una base dura pero flexible para golpear suavemente sin abollar. He leído por distintos blogs que una base de cuero grueso sería buena idea, dependiendo del espesor de la chapa; también otra operativa más compleja es presionar con ruedas de patines haciendola rodar por la abolladura, pero es un poco "trabajo factoría" para estas pequeñas fisuras, para una bici con historia y para mis inicios de principiante.
Las pletinas que estaban en la parte interior de los guardabarros tenían un aspecto, que bueno, muy maltrechas, las imágenes hablan por sí solas, tanto que la rosca anbaba afectada, ya que la herrumbre se hizo dueña de ellas. Y en cierto modo era normal, ya que podría asegurar que no se habían desenroscado ni lavado en décadas; como mucho, el agua de lluvia más el  "alimento contaminado" que contiene el asfalto.
Como perdí en la operación dos tornillos, me acerqué a una tornillería para buscarle sustitutos más alguna que otra tuerca nueva, y aproveché la ocasión para probar si la flauta sonaba y había algo parecido a ésto:
Pletina versión original
Los segundos de silencio que el empleado de la tornillería mantuvo en cuanto vió los tornillos me llamó la atención. Aparentemente son normales aunque la forma de la estrella es, digamos, amplia, ahora son mas ajustados. Para que aguanten más se los pedí de acero inoxidable, algo más costosos pero de esta forma trabajar con ellos será más fácil en el futuro y no se oxidarán (espero que tanto no).
Cuando le mostré las pletinas, me dijo que no tenían. A continuación me preguntó por el origen de las piezas:

- De una bici, del guardabarros de una bici.

En baño de Coca Cola
-  Pues con estos tornillos te van a quedar de lujo. Ahora bien, intenta rescatar estas otras metiendolas en Coca Cola, verás como se quita.
A mí esto del "milagro Coca-Cola" me parece una leyenda, de hecho una vez probé con una navaja Opinel de las antiguas y lo único que conseguí es que se pusiera negra (ahora podría aprovechar y pulirla, si la encuentro).
Y como nada tenía que perder mientras seguía con otras piezas de la bici, decidí sumergirlas en el estimado líquido... Dos días!!
Tras dos días de baño.
Más estropajo, la pletina inferior
Este es el resultado. La chapita inferior ha sido rascada con un estropajo, la otra (la del tornillo) aún no.
Se nota que ha eliminado algo de herrumbre, pero queda mucho por hacer si las comparo con las piezas que estaban colocadas en la parte superior del guardabarros y que mantienen brillo, tan sólo tienen con pequeñas picaduras que limando desaparecerán.
No tengo en casa un tornillo de trabajo y el proceso de limar estas pequeñas piezas pone un poco en riesgo los dedos, a pesar que utilizo guantes en todas las "operaciones". Los cepillos de acero son como puas de erizo y el óxido es el elemento a eliminar, no los dedos y tampoco es plan  que se quede en las manos pegado. Para optimizar un poco más el resultado opté por usar el mini taladro con una piedra de debastar para ver si al menos podía eliminar algo más de óxido. Sujeté las piezas con unos alicates y a darle con la piedra a las dos piezas por ambas caras. El resultado de la operación fué este.
Victimas, tras un buen trabajo
Falta sacar el tornillo y lucirla del todo
Tengo pendiente seguir marcando el cuerpo del tornillo roto haciendo más corte del que he conseguido con un mini disco de corte e intentar sacarlo. Si no funciona, tocará taladrar.
(El tronco de trabajo me llama, para poder trabajar con más comodidad, poco a poco).
El ingrediente principal es la paciencia, que se alimenta del progreso lento que voy observando al ver esa resucitación de piezas... aunque vayan colocadas en la cara oculta de un guardabarros.

martes, 9 de octubre de 2012

Las edades del óxido

Empezar por...

Es probable que los sabios en el manejo de estos "aparatos móviles", para iniciar el proceso de renovación hubieran optado por desmontarlo todo y comenzar las labores de restauración.
Mi particular blog sagrado en estos menesteres es Reciclone, -que enlacé a partir de Anti-oxido- cuando su autor, Jordi Bartoll, contaba en una entrada como iba a montar un suelo de madera en su tienda (aquí la virtual) .. de ahí hacia atrás en sus post hasta el primero, allá en Noviembre del 2009. 
Me encantó la forma, los cuidados y detalles que expresa en el modo empleo, ¡¡como se lo curra!! Me hice adicta lectora silenciosa su blog y de muchos que andan en esta comunidad, los enlaces de otros blogs que se iban y van formando. Entre un enlace  y otro, leía y aprendía mientras recordaba piezas y engranajes que lamentablemente (o no, depende del gusto claro está) ya no se montan en las bicicletas; de como prueban, ensayan, encuentran repuestos de no se sabe donde, optimizan, yerran... leer y ver los progresos es ¡¡¡uffff!!! admirable.
No sabría muy bien explicar, si lo que pretendo es hacer un reflejo de la impresión que recibo leyendo los post de esta comunidad (Recliclone, Bicinova, L'ornitobiker... y mucha, mucha gente más ) el chute que me da la imaginación pensando como realizan los trabajos (lo que daría por estar observando de cerca), el gusto por la elaboración meticulosa de muchas técnicas que si de un crono dependieran ya no existirían.
El trabajo artesano para revivir una bicicleta es pura ciencia al margen del reloj y el resultado tiene una belleza invisible añadida.
En fin, volvamos con la Gacela, la opción elegida es, por lo pronto, pensar que se puede hacer con las llantas para que ese manto extra de óxido desaparezca ó de alguna manera quede disimulado.
Cuando se revisa de cerca se observa el ataque del óxido normal (lo puntitos que hay alrededor de los ojales del radio) y uno más acelerado que, supongo, ha sido debido a una abrasión (lijado) con piedra. Se nota por las marcas lineales. Por algún motivo pensaron que así se eliminaría el óxido que habría en su momento, pero el paso del tiempo y el abandono no ha hecho más que potenciarlo ya que quedó el hierro sin protección.
Lo primero que se me ocurre es eliminar con lija suave para metal e intentar ver que "profundidad" tiene el proceso de oxidación, luego con un abrasivo suave comprobar como va quedando... y haciendome la loca -como si hubiera nada de óxido- (ilusa consciente en proceso de aprendizaje) pulir un poco y ver el resultado.
Como puede apreciarse en la imagen hay que hacer algo más, esto no vale; mis interrogantes para que resultado sea mejor son:
1. ¿Servirá sumergir el aro en ácido oxálico y luego retocar las irregularidades con pintura?
Si funcionara además, trae consigo radiar la rueda. He colocado radios y centrado pero nunca los puse todos. Uhmm....
2. ¿Cromar, presupuesto? 
Son los aros originales y la mitad del aro está en ese estado y la otra no. Es como si hubiera estado sumergida (?).
3. ¿Buscar aros nuevos?
A las malas, busco aros nuevos cromados y utilizo estas de conejillo de indias para mis prácticas. Pero me da cosa, los bujes los he desmontados y están bien.
A ver si descubro alguna salida.
Seguiré investigando; antes de buscar opciones externas tengo que intentar algo, así que cuando haga alguna prueba la comentaré, para bien ó para mal. Consultaré en los blogs sagrados.

Con buenos maestros, se aprende... creo. ;-)

lunes, 8 de octubre de 2012

Aprender no ocupa lugar

Novata en prácticas ¿dónde? 
En el amplio abanico del mundo bicicletil al sur de la vieja Europa observo una, llamemosla así, curiosa carencia, y es la escasa ó inexistente formación "profesionalizada" para la mecánica de la bicicleta.
Y bueno, algún que otro entendido dirá que las bicis no tienen una mecánica compleja. No me refiero a esto, de hecho la mecánica de la bicicleta no es muy difícil, para algunas personas será más fácil que para otras, es evidente. Cierto es que las cosas se aprenden con la práctica y si a eso le añadimos habilidades pues mejor.El caso es que me sorprende que los únicos cursos profesionales para mecánica de bicicleta más cercanos se impartan en Portugal a través de la empresa americana fabricante de herramientas especiales para bicicletas, Park Tool. Hay una excepción digna de citar y fué el primer curso oficial, que se impartió el año pasado (2011) en Barcelona, para jóvenes entre 16 y de 21 años promovido por Probike, la Escuela Pía Calassanci y la Fundación Èxit con un total de 800 horas y Programa de Cualificación Profesional Inicial. Ojalá hayan más y tomen nota en otras Comunidades.
Insisto que es este el tipo de cursos al que me quiero referir. Mecánicos de bicicletas hay como en todo: regulares, buenos y malos -con o sin titulación- claro, pero cursos con carga horaria superior a las 100 horas donde se desarrolle mínimamente un programa, por lo pronto servidora no los ha encontrado; a no ser que algún mecánico profesional esté dispuesto a dar clases ó que me acoja como aspirante a aprendiz... prometo ser buena chica. Tampoco sería muy descabellado con tanta promoción de los cursos de Formación Profesional Ocupacional -esos que eliminan temporalmente a los parados de las estadísticas como desempleados mientras te "re"forman- que promovieran cursos de este tipo, (para todas las edades, mejor). La bicicleta, los usuarios, profesionales del gremio, y ciclistas en general lo agradeceríamos.

viernes, 5 de octubre de 2012

Primer contacto

En amor a la verdad, para aprender y no desilusionarme opté por elegir una bicicleta que no se encontrara en estado crítico. Primero porque es triste dejar una bici arrinconada pasto del óxido, enemigo número uno de las bicicletas en general y más de las veteranas, clásicas ó antiguas. En segundo lugar porque para alcanzar el nivel V antes hay que superar los anteriores y no, no soy un portento. Y tercero porque quiero disfrutar de la evolución paso a paso. Si fuera una lanzada en vez de elegir como víctima a la Gacela me hubiera buscado una bici en el cortijo de algún pueblo y creo, que no hubiera sido capaz de superar la prueba. No se si soy realista ó no confio en mis posibilidades, pero bueno. ¿Cómo elegí la BH Gacela? La terna finalista la formaban tres BH, dos modelo Gacela y la otra una Bolero, algo más moderna. Entre los portales de milanuncios y segundamano tampoco había mucho donde elegir aunque existen más portales, (por ej. bicicleta.es) además en esta ciudad aún no hay un trasiego notable de compra-venta de bicis por las que apuesto. Los handicaps eran: estado de conservación, precio y origen, éste último complicado de reconocer. Tras consultar y ver las bicis me incliné por ésta, más que nada por estado de conservación, ya que entre los precios de las tres había una pequeña diferencia. Cuando concretamos para verla, y era de esperar, el aspecto era un poco más tristón: le habían robado el sillín en el garaje donde se hospedaba, las llantas estaban oxidadas nivel III, dos tirantes traseros pintados en spray negro (?)... a pesar de ello su aspecto en general era aceptable, y también para mi reto.  

Buje y palometa
Palancas cambio - Sujección extraña

Desviador Triplex Extra

Herradura freno trasero
Restos de palometa y desviador Triplex
Al comentarle al vendedor, un chaval que dijo ser productor de audiovisuales, el estado chungo de los "defectos" más cantosos le regateé a ver como reaccionaba, y bueno al final rebajó algo el precio. 

















La verdad es que no sirvo para esto del regateo, me dije. Ya en casa le hice estas fotitos de cerca para asustarme y preparar la estrategia "Incosol para Bicis"

jueves, 4 de octubre de 2012

La idea

Cuando se piensan las cosas, a veces, convertimos lo simple en complejo.

Llevaba dándole vueltas al asunto un tiempo, tanto que para una persona paciente comenzaba a convertise en demasiado. Y así después de muchas vueltas tomé la decisión y tras realizar una investigación de campo me fuí a por ella; elegí a la víctima, su nombre, Gacela BH.


Quienes me conocen saben ó han escuchado las relaciones que he acumulado con estos aparatos, las bicicletas. Pero el reto de desmontarla al completo, nunca lo había realizado. No sé si me manejo bien, mal ó regular pero si en la caja de herramientas se puede encontrar, entre otras cosas, tronchacadenas, extractores de biela, de platos y llaves para radiar, muy pez no estaré... aunque viva al lado del mar.
Meses antes dediqué horas a admirar y aprender del buen hacer de personas que se dedican a restaurar bicicletas, a buscar y descubrir entre los hilos de la red la cantidad de posibilidades que una cosa tan aparentemente simple como es una bicicleta puede ofrecernos. Con ellas he recorrido miles de kilómetros y ahora voy a intentar diseccionar una, rejuvenecerla y verla rodar. Allá vamos.